Por tercer año consecutivo, los pasado domingos 14 y 21 de junio, tuvieron lugar las salidas organizadas por la entidad bancaria Kutxabank, que en esta ocasión invitó a cerca de 90 afortunados clientes de la entidad con una salida en barco para ir a la búsqueda de cetáceos y aves marinas. Desde la Fundación Lurgaia sólo nos teníamos que ocupar del resto, la organización de las salidas para disfrutar de un magnífico día, poniendo a los mejores guías, entre biólogos marinos, cetólogos y ornitólogos, a disposición de los afortunados, para darles a conocer a estos maravillosos animales salvajes en su medio natural y poder así descubrir un poquito más de ellos y, con ello, aumentar la concienciación sobre unos animales, en la gran mayoría de los casos, amenazados y con serios problemas de conservación.
El Golfo de Bizkaia es uno de los mejores sitios para ver aves marinas y cetáceos. En el caso de los cetáceos, en el golfo nos podemos encontrar hasta 24 especies diferentes, aunque en nuestras aguas doce de ellas son las protagonistas; entre los "delfines" (llamados "odontocetos", que suelen ser de pequeño tamaño, con excepciones, con dientes y un solo orificio para respirar) nos encontramos con la marsopa común (Phocoena phocoena), el delfín común (Delphinus delphis), el delfín listado (Stenella coeruleoalba) y el delfín mular (Tursiops truncatus), el calderón gris (Grampus griseus) y el calderón común de aleta larga (Globicephala melas), el zifio de Cuvier (Ziphius cavirostris), las orcas (Orcinus orca) y el cachalote (Physeter macrocephalus), y entre las "ballenas" (llamadas "misticetos", de mayor tamaño, con barbas y dos orificios para respirar) podemos encontrar al rorcual aliblanco (Balaenoptera acutorostrata) y al rorcual común (Balaenoptera physalis), y en los últimos años, la ballena jorobada o yubarta (Megaptera novaeangliae). En el caso de las aves marinas, que nos acompañaran a lo largo de todo el viaje, y a pesar de que esta época del año no es especialmente buena para su observación, dado el mayor número de especies existentes, las posibilidades se multiplican en cuanto al número de especies que podíamos encontrarnos, como gaviotas, pardelas, págalos, alcatraces, paíños, álcidos..., en definitiva, multitud de especies diferentes.
Gráfico de las especies de cetáceos más comunes en nuestras aguas
Lámina de aves marinas de SEO / Birdlife
Fueron dos salidas muy dispares en cuanto a resultados, a pesar de la excelente mar que nos acompañó en ambos casos, pero es que la observación de fauna en libertad nunca tiene el éxito garantizado. Aún así, y como muchos de los agraciados reconocieron, sólo salir a navegar en esta época ya es un aliciente del que se disfruta enormemente.
La salida del día 14 no fue fructífera en cuanto a avistamientos de cetáceos, nuestro gran objetivo en ambas salidas. La leve mar de fondo existente no dificultaba la búsqueda de ejemplares pero los cetáceos, en la mayoría de las ocasiones, se localizan y se mueven en las zonas de alimentación yendo siempre detrás de la comida y, ese día, debía estar el espectáculo en otra zona de esa mar inmensa. La única observación que se produjo, una aleta en el horizonte que no permitió el disfrute debido a su fugacidad, fue hecha por el equipo técnico de Lurgaia y fue tan breve que, ni siquiera, permitió la identificación de la especie. Por lo demás, alcatraces, paíños, gaviotas patiamarillas, nos acompañaron, también de una manera fugaz..., estaba claro que la comida no andaba por nuestra zona.
Los navegantes del día 21 tuvieron bastante más fortuna por cuanto tuvimos la suerte de tener tres avistamientos. La primera de ellas correspondió a un solitario ejemplar juvenil de Delfín listado (Stenella coeruleoalba) que, por su soledad y extraño comportamiento, es posible que tuviera algún tipo de problema. La siguiente observación correspondió a una de las especies joya del Golfo de Vizcaya: 3 ejemplares de Zifio de Cuvier (Ziphius cavirostris) que vimos de lejos y a quienes estuvimos esperando tras su inmersión, sin mucho éxito. Esta especie, de hasta casi 7 metros de longitud y hasta 3.000 kg de peso, se caracteriza por batir el récord de buceo en profundidad a pulmón (recordad que son mamíferos y tienen pulmones como nosotros...), llegando a 137,5 minutos a casi 3.000 metros de profundidad, y si a eso se le añade que suelen ser animales bastante tímidos y esquivos... Parece claro que no querían saber mucho de nosotros. Ya para finalizar sí que pudimos disfrutar de un grupito mixto de unos 50 ejemplares de Delfín listado (Stenella coeruleoalba) y Delfín común (Delphinus delphis) que se encontraban alimentándose. Los delfines comunes, fáciles de identificar por su coloración negra en la parte dorsal y el dibujo de 8 (o de reloj de arena) tumbado en los costados de color amarillo y gris, son pequeños y ligeros con un máximo de 2,70 metros de longitud y a un peso de unos 110 kilos. En cuanto a los delfines listados, tienen unas preciosas coloraciones con dos listas (líneas) muy representativas en ambos lados del cuerpo, y pueden alcanzar los 2,70 metros de longitud y cerca de 150 kilos de peso. A pesar de estar ocupados en plena alimentación, sacaron un ratito para acercarse al barco y hacer las delicias de la gente. Además, tuvimos la fortuna de disfrutar muy cerca de la embarcación de un ejemplar de Pez espada (Xiphias gladius) que pudo ser observado a placer gracias a la transparencia del agua y a la ausencia de viento.
Zifios de Cuvier
Delfines comunes
Delfines listados
Pez espada
"Muchas gracias a Gari Bilbao por sus fantásticas fotos"
Respecto a las aves marinas debemos tener en cuenta que esta época del año puede que sea de las más pobres en cuanto a especies ya que únicamente solemos encontrar ejemplares de las escasas especies que se reproducen en nuestra costa, caso del Paíño europeo (Hydrobates pelagicus) o de la Gaviota patiamarilla (Larus michahellis), o de ejemplares no reproductores de otras especies norteñas como el Alcatraz atlántico (Morus bassanus). Todas estas especies, más 4 ejemplares del pato marino Negrón común (Melanitta nigra) ya en migración fueron observados en las salidas.
Sólo nos queda agradeceros a todos el buen ambiente, a Kutxabank por la confianza depositada en nosotros, y si las circunstancias lo permiten, volveremos a la mar con nuevos navegantes de Kutxabank; sólo esperamos que todos los que nos vuelvan a acompañar, puedan tener la suerte otra vez de disfrutar de estos fantásticos animales salvajes en su medio natural.
Sólo nos queda agradeceros a todos el buen ambiente, a Kutxabank por la confianza depositada en nosotros, y si las circunstancias lo permiten, volveremos a la mar con nuevos navegantes de Kutxabank; sólo esperamos que todos los que nos vuelvan a acompañar, puedan tener la suerte otra vez de disfrutar de estos fantásticos animales salvajes en su medio natural.
¡¡¡Hasta la próxima!!!
Os hacemos saber que, además de las diferentes formas de colaboración con la Fundación Lurgaia (voluntariado, socios, ...), como clientes de Kutxabank, podéis colaborar con la Fundación Lurgaia por medio de la nueva Visa Nakar Lurgaia. Solo tenéis que solicitarla en vuestra oficina Kutxabank más cercana y de este modo, y sin daros cuenta, nos estaréis ayudando en la conservación del medio ambiente.
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